jueves, 26 de mayo de 2005

Israel

Un amigo al que le había dejado una novela de Batya Gur me dijo que otro amigo le había dicho que me gustaban esas novelas porque soy muy proisraelí.
Me gustaron por méritos propios, aunque acepto que tengo simpatía por Israel; además, de Gur se podrá decir todo salvo que es complaciente: uno de sus grandes méritos es mostrarnos un país lleno de conflictos entre judíos, siempre amenazados, viviendo con la violencia. Quizá haya que recordar que el estado de Israel se fundó porque tenían certeza de que nadie los quería en el mundo; incluso se plantearon hacer un país en Madagascar. Las contradicciones teóricas de la creación del estado de Israel (que son fuertes) las podéis ver en Muerte en el kibbutz, de Gur. Viví de pequeño en un pueblo que organizó en el siglo XIV un progrom contra los judíos. Al lado hay otro pueblo de nombre Castrillo Matajudíos. Se puede decir que soy cristiano viejo (aunque no sé cuánto de viejo), pero no me extrañaría -ni me importaría, más bien me enorgullecería- tener antepasados judíos. Estoy leyendo estos días los Cuentos para niños de Isaac Bashevis Singer (en realidad releyéndolos): son muy buenos. Supongo que ya habré dejado escrito aquí algo sobre él: su tremenda novela Sombras sobre el Hudson, sus relatos (por ejemplo la colección Un amigo de Kafka), la mayoría de sus novelas, que no me acaban de convencer, sus memorias, tan decepcionantes por amargas, cuando sus cuentos son un prodigio de alegría. Israel, el pueblo de Jesús, cuyo dolor de milenios comprendió tan bien Juan Pablo II, un dolor del que también hemos sido culpables los cristianos. Aquel momento de Juan Pablo II rezando en el Muro de las lamentaciones.

En Israel han hecho un sello de aquel momento.

1 comentario:

  1. El razonamiento "del amigo del amigo" nos llevaría a concluir que si nos gusta el "Viaje al fin de la noche" de Céline es porque somos pronazis. A estas conclusiones aberrantes nos lleva el juzgar la literatura con anteojeras ideológicas. Y si de lo que hablamos es de Israel, no estaría de más recordar que se trata de la única democracia de la zona.

    ResponderEliminar